¿POR QUE BASAMOS NUESTRA METODOLOGIA EN ACTIVIDADES DE EXPERIMENTACION?
¿Por qué tanta
importancia a los sentidos?
La
creación de un ambiente rico en estímulos táctiles, visuales y auditivos, junto
con un clima lleno de afecto y la adecuada satisfacción de sus necesidades,
ayudarán al niño en su crecimiento y en el desarrollo de sus capacidades y
habilidades
Las sensaciones constituyen la fuente principal de nuestros conocimientos
acerca del mundo exterior y de nuestro propio cuerpo. Son los canales básicos
por los cuales la información sobre los fenómenos del mundo exterior llegan al
cerebro dándole al niño la posibilidad de orientarse en el medio y con respecto
al propio cuerpo.
Las sensaciones le permiten al niño
percibir las señales y reflejos, las propiedades y atributos de las cosas del
mundo exterior y los estados del organismo.
Ellas vinculan al niño con el mundo
exterior y son tanto la fuente esencial del conocimiento como la condición
principal para el desarrollo psíquico de la persona.
Estas sensaciones son captadas por los
sentidos presentes en nuestro cuerpo. Se reconocen cinco sentidos: tacto, oído,
vista, gusto y olfato. Se trata de que el niño/a sea capaz de percibir,
interpretar, juzgar, descubrir el origen y disfrutar de las sensaciones
recibidas, mediante la experimentación, que van a ser la base de conocimiento y
relación con el mundo exterior.
En la infancia, es donde más se
desarrollan dichos sentidos. Gracias a ellos, los pequeños exploran, descubren
y conocen lo que les rodea. De este modo
sus capacidades están mucho más estimuladas y receptivas. En esta etapa el
niño/a está capacitado para recoger información, se parte de lo conocido a lo
desconocido, de lo simple a lo complejo, de lo cercano a lo lejano, junto con
las relaciones personales y sociales el niño/a empieza a desarrollarse como
persona
Por todo esto hemos decidido acercarles,
aún más, a cada uno de ellos facilitando materiales, espacios y objetos
que les permitan un mayor y mejor
acercamiento al mundo de los sentidos. Las actividades que realizamos son
cercanas a la realidad del niño/a, utilizando objetos de la vida cotidiana,
siendo atractivos y seguros.
La experiencia sensorial es siempre
personal, porque cada persona percibe de forma distinta y sus reacciones serán
variables. La relación del niño/a con el entorno se inicia a través de los
sentidos y las sensaciones que perciben, construyendo sus propias ideas.
¿Qué
es la Integración Sensorial?
La Integración Sensorial es el proceso
neurológico a través del cual las sensaciones que provienen de nuestro entorno
y de nuestro cuerpo están organizadas e interpretadas en nuestro cerebro para generar
una respuesta adaptada. Normalmente, no prestamos atención a este proceso de
ordenar la información sensorial, debido a que estos procesos tienen lugar de forma
automática e inconsciente dentro del sistema nervioso. Nuestra mente y nuestro
cuerpo están constantemente en acción para dar respuesta a las demandas del
mundo actual. Las sensaciones, pensamientos y acciones que experimentamos son
procesados a través de nuestro sistema nervioso central, que genera las
respuestas adaptadas que se nos exigen. Este conjunto de acciones reciben el
nombre de Integración Sensorial.
Para la mayoría de los niños, la Integración Sensorial
se desarrolla de forma natural a lo largo de su infancia, a través de una
multitud de actividades y estimulaciones que reciben. Sin embargo, para algunos
niños, este proceso de Integración Sensorial no se desarrolla de forma
eficiente. Cuando esto sucede pueden hacerse evidentes diferentes problemas: de
aprendizaje, de motricidad, de lenguaje, de comportamiento, de socialización, etc.
La
importancia de los sistemas sensoriales
Todos estamos familiarizados con los sentidos
del gusto, olfato, vista y oído, pero existen 3 sistemas sensoriales que aún
son más importantes para que nuestro sistema nervioso central pueda madurar
correctamente. Son el sentido del tacto, del movimiento (vestibular) y de la
posición del cuerpo en el espacio (propioceptivo). Cuando el niño es capaz de
procesar correctamente estos 3 sistemas sensoriales, es capaz de mantener un
nivel de alerta adecuado para cada actividad que le permite aprender y madurar
de forma adecuada en todas las áreas del desarrollo.
Cuando nuestro sistema nervioso central no es
capaz de organizar, interpretar o integrar la información que recibe a través
de alguno de los sistemas sensoriales, esta alteración va a tener un impacto en
el desarrollo del niño y en las áreas ocupacionales.