REFLEXIONEMOS:
Después de alguna que otra decepción, de
malos momentos, de añorar a compañeras, de enfadarme con otras… una se da
cuenta de que ni todos somos iguales ni todos podemos aportar lo mismo.
Lo que me hace llegar a la conclusión que a pesar de todo, de todo lo “malo” que pueda existir en un trabajo (condiciones económicas, escasos recursos, desilusión, poca motivación diferencias personales) somos afortunadas de ser un equipo, un gran “equipo educativo” con una gran variedad de gente. Gente que seguro puede aportar cosas distintas que nos hacen crecer como equipo, incluso, como personas, pues siempre tenemos algo que aprender de los demás.
Esas diferencias nos hacen enriquecernos en
nuestro trabajo y sobretodo en nuestra vida, por lo que debemos convertirnos en
personas empáticas que entendemos y respetamos al compañero, así como sus
idead, sus metas o sus intereses.
Tal y como está ahora la vida, debemos ser
conscientes de que existen pequeñas cosas que hacen que un día pueda ser
especial. Un abrazo de un compañer@, una sonrisa a su llegada o una idea.
Todos debemos nutrirnos de todos. No creo que
haya nada que nos haga mejores o peores al resto, tan solo diferentes.
Por todo ello animo a todos los compañeros de
trabajo, de profesión… que compartan experiencias o dudas respecto a la hora de
afrontar un día en la escuela. Que exista una comunicación pero sobretodo que
aprendamos a valorar las buenas ideas y que nos alegremos de tener compañeros
que nos ayudan, aunque solo sea para darnos un abrazo cuando más lo necesitamos.
Puede que así, el día a día en la escuela o en el trabajo, sea mucho más llevadero.
¿Y por qué hoy este post? Porque no vale de nada ser una buena profesional en tu aula, si primero, como personas, no somos buenas compañeras con nuestro equipo, porque igual de importante es la actividad que le presentamos a los niños como las relaciones dentro de la escuela. Porque "NO LE ENSEÑES A UN NIÑO A DAR LAS GRACIAS, DALAS TU PRIMERO"
Nosotras aparte de enseñar conceptos o acompañerles en su crecimiento debemos enseñarle a ser buenas personas, SEAMOS NOSOTROS MISMOS BUENAS PERSONAS.
Y ahora solo invito a la reflexion: ¿Nos gusta que nuestros compañeros tengan buenas ideas? ¿Nos gusta compartir las ideas propias? ¿Qué sentimos cuando se aportan buenas ideas? ¿Cómo reaccionamos ante los logros de los demas? ¿Podemos mejorar en todo esto?
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